Las bombas eléctricas son aquellas que funcionan con alimentación eléctrica ya sea con corriente alterna ( 230V-380V ) o continua ( 12V-24V ) y que mediante su motor transforma la energía en movimiento que mueve las paletas que a su vez generan una depresión y presión en la cámara, esto hace que un fluido entre por la aspiración y salga impulsado por la impulsión consiguiendo el trasvase del líquido.
Una parte importante de una bomba eléctrica de trasiego son sus materiales de construcción y componentes, estos deben ser resistentes y a la vez compatibles con el fluido a trasvasar, materiales como el acero y aluminio entre otros se emplean en la construcción de bombas para combustibles como diesel, gasolina, queroseno, JetA1, fuel oil y lubricantes y aceites. El acero inoxidable y otros plásticos como el polipropileno se utilizan para el trasvase de urea AdBlue, anticongelante, líquidos limpiaparabrisas y otros productos químicos o productos para alimentación.
Las bombas eléctricas pueden utilizarse para una instalación fija en depósitos, equipos de suministro, surtidores, sistemas de bombeo o carga de cisternas. Y también se utilizan para equipos de bombeo o suministro portátiles como depósitos GRG, kits de trasvase móvil, equipos de microfiltraje, sistemas de distribución en camiones cisterna, etc…
Las bombas autoaspirantes tienen como particularidad que están diseñadas para poder bombear líquidos que contengan aire o gas sin perder capacidad de bombeo con una entrega de caudal constante. Desde las bombas convencionales de caudales de 10 litros por minuto a bombas de gran caudal para trasvases de hasta 400 L/min.